“Con Laberintos, Manuel Osuna nos demuestra su dominio sobre el género del suspense y del terror, y nos brinda una antología muy completa y variada, y con un nivel muy alto. Un autor para tenerlo en cuenta en un futuro no muy lejano”.
Un monasterio
medieval, el Titanic, un videoclub o la piscina municipal. En
cualquier lugar pueden suceder historias inquietantes y aterradoras.
Manuel Osuna presenta 13 relatos de suspense –varios de ellos
ganadores en certámenes literarios-, que atrapan y que son como los
caminos de un laberinto: retorcidos, angustiosos, con giros
inesperados y finales impredecibles.
Los crímenes del
videoclub.
Certificado de
defunción.
Había una vez un
circo.
El dentista de
Baker Street.
Indigestión.
Campanero.
Catorce
corderitos.
La manzana
podrida.
La mascota del
Titanic.
Mundo Diversión.
El caso de la
costurera caníbal.
Noche de castigo
en Hamelín.
Bañistas:
Laberintos es el
primer libro publicado de Manuel Osuna, autor que para su primera
publicación ha optado por una antología que recoge trece relatos,
algunos de ellos, ganadores de certámenes literarios o finalistas en
otros casos. Para contar estos relatos, ha optado en su mayor parte
por el género del suspense, y en menor medida por el terror. Manuel
demuestra en todos y cada uno de los relatos, de un nivel bastante
alto en su gran mayoría, que se mueve como pez en el agua, dando
muestras de su calidad y en algún que otro de los relatos,
auténticas joyas. A continuación, el lector tiene un pequeño
resumen de los trece relatos que se incluyen en esta antología.
Los crímenes del
videoclub:
Relato donde el
lector asistirá al enfrentamiento entre un inspector de policía y
un asesino en serie, con la peculiaridad de que los crímenes guardan
relación con películas muy conocidas en la historia del cine, y en
algunos casos, con grandes clásicos del celuloide. Una historia
donde el autor hace su homenaje al mundo del cine, y donde se le ve
su cariño y pasión por todo lo relacionado con la gran pantalla.
Relato muy ameno, ágil, con un ritmo que no decae en ningún
momento, y con algún que otro momento inolvidable, una muy buena
manera de comenzar una antología.
Certificado de
defunción:
Relato que nos
cuenta las vicisitudes en las que se verá metido un empleado de una
funeraria para transportar un cadáver en plena nevada, donde tendrá
que tomar una difícil elección, con unas consecuencias totalmente
imprevistas para él. Historia con algún que otro toque de humor y
que se lee rápida. Relato que sin estar a la altura del primero,
mantiene un nivel bastante alto.
Había una vez un
circo:
En mi opinión,
uno de los mejores relatos del libro, donde el autor nos cuenta cómo
viven los trabajadores de un circo venido a menos, y de las medidas a
las que se verán obligados a tomar para intentar salvarlo, siendo su
único sustento de vida, con un final inesperado.
Historia algo
triste, que deja algo de mal cuerpo al lector. Está narrada de una
manera en la que se palpa la desesperación y angustia de los
componentes que forman parte de este circo. De lo mejor de la
antología.
El dentista de
Baker Street:
Relato
protagonizado por Sherlock Holmes y su inseparable Watson. El autor
nos cuenta un peculiar caso que transcurre en la consulta de un
dentista, con un final donde se vuelve a ver la gran capacidad
deductiva del más famoso detective. Historia que te deja una sonrisa
después de terminar de leerla, y donde se respeta en todo momento al
popular personaje creado por Doyle. Entretenida, bien escrita y que
gustará a los seguidores de Sherlock Holmes.
Indigestión:
Relato donde el
suspense queda apartado, para dejar paso al terror, y donde nos
cuenta las vivencias de la típica familia que se va de vacaciones a
la playa y que descubren un lugar donde reina la tranquilidad. Lo que
en apariencia parece un paradisíaco lugar, se transformará en la
peor de sus pesadillas, con un final sorpresa. Historia que comienza
con absoluta tranquilidad, para acabar siendo de auténtico terror, y
donde el autor demuestra que también se mueve como pez en el agua
dentro de este género. Esta historia está entre las cinco mejores
de la antología.
Campanero:
Relato donde el
autor hace su peculiar homenaje al Jorobado de Notre Dame, y donde
demuestra que Quasimodo posee una inteligencia que en apariencia no
parecía tener, donde veremos a lo que puede llegar a ser capaz de
hacer por amor, con un final inesperado y algo triste. Historia que
se lee en un suspiro, con un ritmo rápido y muy ameno, sin ser de
los mejores del libro, mantiene un buen nivel.
Catorce
corderitos:
Relato donde el
lector asistirá al destino de un grupo de chicos y chicas encerrados
en un laberinto, donde tendrán que intentar escapar de las trampas y
de unos terroríficos seres. ¿Lograrán salir con vida todos,
sobrevivirá alguno? Una historia donde se palpa la angustia y el
terror que sienten los protagonistas. Un relato que puede recordar a
algunos títulos, pero con un toque más adulto y oscuro. De lo mejor
con diferencia.
La manzana
podrida:
Relato que
transcurre en un monasterio y ambientado en el siglo XIV, narrado en
forma de diario por el monje encargado y responsable de dicho
monasterio, y donde nos contará los terribles sucesos que sucedieron
en él. Una de las joyas de la antología, donde el autor narra con
pulso firme la historia que dio lugar a unos acontecimientos
totalmente inesperados y cómo reaccionó el responsable del
monasterio, y las terribles consecuencias derivadas de dichos actos.
Relato donde se palpa la terrible angustia del protagonista, y como
se vio obligado a hacer lo que aquí se narra.
La mascota del
Titanic:
Relato donde el
suspense y el terror se ven apartados para dejar sitio al humor, y
donde se cuenta la historia de uno de los barcos más famosos de la
historia, pero con un final que totalmente inesperado. Historia
protagonizada por pequeño canino y que sembrará el caos y el pánico
allá donde vaya. Divertido, rápido de leer y que va directo al
grano, dejando al lector una pequeña sonrisa al final.
Mundo diversión:
Historia
protagonizada por una joven reportera y ambientada en lo que es en
apariencia un tranquilo parque de atracciones, pero donde se verá
que guarda un terrible secreto. Relato de suspense con algún que
otro misterio y con algún fantasma pululando por dicho parque.
Contado de una
manera muy directa y sin concesiones, con un final donde el autor
vuelve a demostrar su calidad.
El caso de la
costurera caníbal:
Segunda y última
historia protagonizada por Holmes y Watson, y donde tendrán que
resolver un misterioso asesinato, con una peculiar costurera como
sospechosa. Al igual que el anterior relato protagonizado por estos
personajes, el autor mantiene el mismo respeto por estos conocidos
personajes, dotando a la historia de una muy buena atmósfera, y
escrito con pulso firme.
Noche de castigo
en Hamelín:
Relato con toques
de terror, con el peculiar flautista, ya conocido por todo el mundo,
y donde el autor le da un giro inesperado a la ya conocida historia.
En este caso con un final plagado de terroríficos momentos. Relato
imprescindible en esta antología.
Bañistas:
Historia que
narra las vicisitudes de un grupo de personas plagadas de fobias, en
este caso relacionadas con los gérmenes, y donde su psicóloga les
pondrá una terapia de choque: ir a una piscina pública, uno de los
lugares donde más gérmenes puede haber, para que así intenten
superar sus serios problemas, pero cuya resolución no saldrá como
la psicóloga esperaba, dando lugar a unos acontecimientos totalmente
inesperados. En mi opinión, el mejor relato de esta antología,
donde el lector sentirá la angustia del grupo protagonista, y
asistirá estupefacto a unos hechos que cambiarán la vida de todos
los que estaban en dicha piscina, y de qué manera les cambiará la
vida. Solo por este relato merece la pena adquirir este libro.
Laberintos es la
carta de presentación de este autor, y esperemos que no sea lo
último que leamos de él. Una muy buena antología, donde el autor
da rienda suelta a su imaginación, y la mayoría de los relatos que
componen este libro son de un nivel bastante alto. Como en todo este
tipo de recopilaciones, hay historias mejores que otras, pero en este
caso, no hay ningún relato malo, lo que es de agradecer.
En definitiva,
Laberintos es un libro muy recomendable para los amantes de las
antologías y para todo aquel que quiera conocer a Manuel Osuna, del
que un servidor quiere volver a leer más relatos, y ¿por qué no?
Una novela suya. Una muestra de qué hay autores que no son muy
conocidos, pero que merecen una oportunidad de qué sean leídos.
Muchas gracias a Jorge Herrero por la estupenda reseña. Un placer aparecer en esta página, una gran ventana para que "Laberintos" se conozca un poco más. ¡Gracias de nuevo! ;)
ResponderEliminarNo conozco a este autor pero con tu res el me han entrado unas ganas terribles de leer el libro. Tomo nota.
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