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jueves, 14 de enero de 2016

Entrevista a Leandro Pinto - Entrevista de Jorge Herrero



Hoy tenemos una entrevista a un joven autor argentino afincado desde hace años en Canarias, este autor es Leandro Pinto, escritor que ya cuenta en su haber cinco novelas, Orlando Brown (2010), Remanso de Paz (2011), Veneno de Escorpión (2012), Consejera Nocturna (2013) y Pandemonio (2014) con la que está cosechando bastante éxito entre el público y la crítica. Coincidiendo con esta entrevista, comentar que acaba de salir al mercado la segunda edición de Pandemonio, siendo su novela de más éxito.

Esperamos que a los seguidores de La Ventana Secreta 6, le guste esta entrevista y sientan curiosidad por conocer la obra de Leandro Pinto.

Antes que nada, agradecerte tu tiempo y atención al concedernos esta entrevista, Leandro, y darte la bienvenida a nuestro blog, La Ventana Secreta 6, para poder conocerte algo más y saber de tus novelas y próximos proyectos.

-Encantado de saludaros y de pasarme por aquí. Sigo vuestro blog desde hace tiempo.


¿Por qué eres escritor?
-Porque lo necesito para vivir. Así se simple. No concibo la existencia sin la escritura y en mi caso es un impulso tan animal, tan primario, que casi nunca me cuestiono por qué lo hago. Alguna que otra vez me ha rondado la pregunta por la cabeza. «¿Qué haces aquí, escribiendo tonterías? ¿Por qué estás aquí haciendo esto, y no en otra parte haciendo otra cosa?». La respuesta, entonces, surge a modo de pregunta casi violenta: «¿Pues por qué ha de ser, pedazo de animal?¡Déjate de preguntas sin sentido y sigue trabajando!». Suele ser bastante automático. Si se trata de buscar una respuesta algo más racional, algo más elaborada, diría que porque hay innumerables historias que no se han contado, y alguien tiene que contarlas; como he descubierto que pocas cosas hay tan divertidas como esta, me he puesto a hacerlo y pienso hacerlo mientras viva.

¿De dónde salió la idea para Pandemonio, tu última novela?
-Tengo un amigo, Nicolás, que es argentino como yo. Siempre que nos vemos comenzamos a recordar series de televisión que emitían en nuestro país, como si fuéramos dos ancianos exiliados de su patria desde hace decenios. Un día apareció con un planteamiento interesante: ¿y si un hombre que adopta un corazón ajeno mediante un transplante coronario recibiera un día la visita del diablo reclamando ese órgano, ya que le fue legalmente vendido por su propietario original?

El concepto estaba emparentado con el de una vieja serie argentina de los noventa, llamada El garante, de similar argumento. Me pareció una idea de partida alucinante. Le advertí que me la apropiaría sin remedio. No solo no le importó, sino que me animó a que le diera vida, a que me explayara sobre ella. Y a fe que lo hice. El planteamiento de partida sufrió muchísimas modificaciones y ramificaciones, se incorporaron multitud de personajes y situaciones que no constaban en el escueto argumento que mi amigo me ofreció, pero podríamos decir que fue él quien plantó la semilla inicial.
A partir de ahí, toda la historia encerrada en las páginas del libro. Como reconocimiento, le dediqué la novela; era lo menos que podía hacer por él. ¡Ah!, y está muy orgulloso del éxito que ha tenido «su» idea…

¿Podrías contar a los lectores cuál es tu manera de trabajar a la hora de hacer una novela?
-Lo cierto es que varía un poco de acuerdo a lo que esté escribiendo; no existe, por lo menos en mi forma de trabajar, una fórmula fija. Sí es cierto, no obstante, que en líneas generales he logrado establecer un patrón. Una idea surge; si es medianamente interesante va a parar a una libreta monumental en la que apunto todas las ideas en fase embrionaria, apenas unas palabras que me indiquen de qué va la cosa.
Suelen ser ideas que hibernan entre esas páginas durante mucho tiempo, hasta que un día las desarrollo y las convierto en novelas o relatos. Eso cuando las ideas poseen un interés inicial medio. En cambio, cuando son demasiado tentadoras, no suelo apuntarlas en absoluto; no existe el miedo a que se me borren de la mente porque tienen tanto peso que, desde que incuban en mi cerebro, no me dejan dormir y casi no me dejan respirar. Es entonces cuando me vuelco a escribirlas como un lunático. Este proceso roza muchas veces la enajenación, y me entrego a sesiones de escritura maratónicas y casi inhumanas, de tres mil o cuatro mil palabras al día. Suelen ser un puñado de semanas bastante frenéticas, en las que me invade una inquietud extraña.

La historia lanza alaridos y gritos chirriantes en mi mente porque clama por salir a la superficie y me entrego a la ceguera que me provoca esa necesidad de «extirparla», de «expulsarla» al mundo exterior. No me detengo demasiado a investigar; y vuelvo atrás tan solo para corroborar algunos nombres, lugares y fechas; se trata simplemente de vomitar la historia sobre el papel. Una vez que la primera redacción está terminada, respiro y me relajo un poco. Las voces en mi cabeza han dejado de berrear y me siento en paz conmigo mismo. El manuscrito —que suele estar plagado de incongruencias— va a parar a un cajón, de donde lo extraigo algún tiempo más tarde. 
Por lo general dejo pasar un par de meses, tiempo que empleo en trabajar en algo más corto, una corrección o algunos relatos. Entonces lo saco del cajón, lo leo de cabo a rabo y tomo nota de muchas cosas: del argumento, del carácter de los personajes; trazo una línea narrativa más clara; elaboro una sinopsis detallada; redacto una cronología precisa; investigo lo que haga falta; recabo el material necesario. Sobre todo, me pregunto de qué va el libro, qué historia intento contar y cómo quiero contarla, qué estilo utilizaré, qué clase de vocabulario he de emplear, etcétera. Una vez hechas todas estas tareas, escribo el título en una página en blanco y redacto la novela desde cero, desde el principio.
Esta vez con mucha más sangre fría que durante la primera redacción, claro. Es mucho más fácil hacerlo sin todas esas voces taladrándome el cerebro. Entonces sí que me esfuerzo porque no haya incongruencias ni fallos técnicos y porque cada cosa esté en su lugar. Teniendo como base el primer manuscrito, y combinando la historia ya escrita con toda la información que he conseguido y los apuntes que he tomado, nace así la segunda redacción, que en la mayoría de los casos suele ser definitiva. Ahora solo queda corregir y revisar el segundo manuscrito hasta la saciedad, entre doce y quince veces, antes de entregarlo al editor.

¿Cuál de tus novelas te ha planteado más dificultades a la hora de escribirla? 
-Veneno de escorpión,  sin duda. Fue la más complicada, la más compleja y la que más trabajo me reportó. Fue por muchos motivos: por un lado, la antipatía que me despertaba la historia en un principio. Por otro, la resolución, que no acababa de vislumbrarla entre el laberinto de telarañas y misterios que yo mismo había tejido. Y, finalmente, porque la confección de la estructura me dio más problemas de los que había esperado, y el proceso que describí en la respuesta anterior tuve que llevarlo a cabo hasta cuatro veces, redactar la novela en cuatro ocasiones distintas.

La implicación con el personaje principal fue absoluta y durante muchos pasajes llegué a sentir una especie de parentesco realmente temible, casi hasta el punto de espantarme con las mismas sombras que atemorizan al protagonista durante toda la novela. Pero estoy muy contento con el resultado. Es mi novela más especial, y la primera que realmente pegó en el público. Siempre quedará en mi recuerdo todo el proceso porque terminó siendo el paradigma de lo que para mí representa el oficio de escritor: ni más ni menos que el de una persona que se arroja en mares ignotos e incontrolables, donde casi nada termina saliendo según lo planeado y donde estás a merced de unas fuerzas intangibles que nunca estará en tus manos poder fiscalizar.


¿Cómo te suelen surgir las ideas para tus historias?
-Casi se puede extraer una historia de cualquier parte si uno tiende a ejercitar mucho la imaginación, como es mi caso. De una reunión familiar, de una anécdota laboral, de un encuentro con amigos, de una caminata fortuita por una carretera desolada, de las múltiples lecturas en las que uno se sumerge a diario. Pero sobre todo de los sueños. Yo he encontrado muchísimos embriones de historias en las aventuras de mi subconsciente. Suelo tener la típica libreta para apuntar esos retazos cuando me despierto a mitad de la noche, o por la mañana, si los recuerdo.
Lo que ocurre también es que cuando te dedicas al terror y a la fantasía, incorporas como una especie de filtro especial en alguna parte de tu cerebro, el cual metamorfosea cualquier incidente más o menos banal de la vida cotidiana en un misterio por resolver o en una situación de partida hacia un desenlace que pueda acercarse a lo espeluznante. Resulta muy divertido, y además se vuelve un proceso casi automático con el correr de los años.

¿Con qué género te sientes más cómodo a la hora de escribir, y por qué?
-El terror es lo mío, eso está claro. A menudo experimento con otros géneros, siempre dentro de los oscuro y lo siniestro, aunque sin ser esencialmente historias de terror. Me gusta practicar cualquier tipo de literatura, pero es evidente que cuando buceo en el horror —en cualquiera de sus ramas— me siento muy cómodo, como si pisara terreno conocido. Me encanta enfrentarme a lo inexplorado y a lo imposible, y poner a prueba la capacidad de imaginación de los lectores y su umbral de tolerancia ante el horror. El mío suele ser bastante alto, así que intento concentrarme en transmitir esos sentimientos a través de mis novelas.

Siento que quienes nos inclinamos hacia estas temáticas —tanto en nuestra faceta de autores como de lectores— contamos con el privilegio de lo impredecible, del descubrimiento de esa garra monstruosa y letal oculta tras cada recodo, tras cada vuelta de página. Cuando un libro de terror está bien escrito y la historia tiene peso, te sudan las manos, y esa es una de las mejores experiencias que se pueden tener ante un libro. El porqué de mi inclinación por este género resulta, creo, bastante obvio: es apasionante desde todo punto de vista, y amplísimo por las posibilidades que ofrece en cuando resoluciones, planteamientos, obsesiones de los personajes, comportamiento de los entes y muchas cosas más. 
También entiendo que se debe a que es el género que más suelo leer, desde sus orígenes en el gótico hasta nuestros días. Me considero no solo un lector afanoso de terror, sino un estudioso del género; siempre me ha gustado desgranarlo y analizar su evolución, las innovaciones que han ido incorporando los distintos autores y, cómo no, también intentar aportar mi granito de arena a la inconmensurable pirámide de lo truculento.

¿Qué piensas del actual estado del panorama literario español?
-Me resulta curioso, un poco ambivalente. Combina gente muy talentosa con mucha producción surgida de ámbitos que no tienen nada que ver con la literatura —presentadores de televisión, actores, futbolistas, etcétera—. Tiene uno la sensación de que escribir se ha puesto de moda y que es una parcela que cualquier personaje público debe cubrir. Ojo: no estoy diciendo que estos libros sean malos —no puedo afirmarlo porque no los he leído, y nunca podré afirmarlo o desmentirlo porque nunca los leeré— pero es cierto que se percibe cierta «invasión», por llamarla de alguna manera. 
También hay sorpresas muy agradables, autores de verdadera enjundia que poco a poco están labrando un terreno más que provechoso —preferiría no nombrar a ninguno, porque me dejaría fuera al resto—. Creo que hay un poco de todo; se trata simplemente de filtrar no lo bueno de lo malo, ya que no existen parámetros para determinar semejante filtro, sino lo que a uno puede gustarle de lo que no.

¿Qué clásico te habría gustado escribir? ¿Por qué?
-Drácula, sin ninguna duda. Es un libro que no me canso de leer. Y aclaro que no lo considero un libro perfecto, pero justamente me gustaría haberlo escrito para solventar esos pequeños fallos que le veo —tengo escritos un par de «finales alternativos» y algún que otro pasaje que incluiría en «mi» versión—. ¿Por qué elijo Drácula? Pues porque es la madre de todas las novelas de terror y, en mi opinión, la piedra angular de todo el género. No digo que sea la mejor, pero sí la más importante novela de terror jamás escrita.
Publicada en un momento clave —1897—, establece el equilibrio perfecto entre el gótico clásico y el terror moderno, mantiene una prodigiosa mesura entre estas dos escuelas, y es una novela profunda y escalofriante. Además, es pionera en el uso de diarios, cartas, recortes de periódicos y crónicas manuscritas como método único de narración, y tipifica de forma definitiva la figura del vampiro, ente esencial en la historia del terror literario. ¿Se le puede pedir más? Sí, me encantaría haberla escrito, aunque eso me supusiera llevar ciento tres años bajo tierra, como Bram Stoker.

Si hicieran una película de Pandemonio ¿Tienes a algún actor, actriz en mente?
-La verdad es que tengo el casting más o menos claro. Robert Duvall está un poco anciano ya, pero el Duvall de hace diez o quince años sería ideal para hacer de «Pichi» Castillo. Gregorio Salas lo interpretaría Steve Buscemi, es clavado a como lo imaginé mientras lo describía. Christian Slater de jovencito me vale para hacer de Diego Agustín Delgado, es decir, Merlín en su forma terrenal primigenia o mientras se pasea por los corredores de Pandemonio. 

¿Quién más? Kathy Bates haría una estupenda Mamá, sin duda ¿Liberman? Ese lo haría Dan Aykroyd, por ejemplo. Y Demi Moore con gafas haría de Antígona, quedaría muy sexy. Con el Pirata me gustaría hacer un cameo, alguien que no es actor pero a quien le va el personaje como un guante: Rob Halford, el cantante de Judas Priest —el papel no tiene muchas complicaciones; solo tendría que repartir unos cuantos mamporros, y Halford estaría encantado de hacerlo—. El Rata se lo dejo a Nathaniel Brown, que tiene mucha mala leche y se parece bastante. Me olvido de alguien importante ¿no? Sí: Tempestad. Vamos a por todas: que lo haga Clint. ¿El director de la peli?: Quentin Tarantino, claro —la duda ofende—.


¿Tienes algún nuevo proyecto en mente?
-Muchos. Tal vez demasiados como para sobrevivir a todos ellos. Pergeño varias cosas. Lo primero: hacer llegar Pandemonio a todos los lectores posibles; ese es el desafío para estas Navidades. La segunda edición ya está en las calles y me consta que el entusiasmo por la novela sigue muy vivo. De aquí a unos meses espero por fin ver publicada mi colección de relatos, Un puñado de sombras, un sueño que tengo desde hace tiempo: una propia antología de relatos, un compendio de lo que he estado escribiendo todos estos años entre novela y novela. 
El manuscrito está terminado y solo estamos… bueno, esperando el momento propicio para lanzarlo al mercado. También preparo un díptico sobre la demencia, dos noveletas de terror ambientadas en sendos centros psiquiátricos. Acabo de terminar una novela sobre unas criaturas caníbales que asolan un pueblo rural, y que puede que se convierta en la primera parte de una saga. Tengo un boceto bastante avanzado sobre una novela de vampiros de envergadura, un trabajo serio.
La segunda parte de Pandemonio me ronda por la cabeza y seguramente le daré forma en algún momento. Más relatos. Un ensayo sobre Lovecraft. Una historia acerca de un cementerio inmemorial que conecta mediante catacumbas con una casa ancestral —embrujada, desde luego—. Un par de cosas más. Demasiadas como para sobrevivir a todas ellas…

¿Sobre qué género no has escrito y te gustaría probar?
-Ciencia ficción. Siempre me atrajo, tanto a nivel literario como cinematográfico. Entiendo que todavía no puedo aventurarme en semejantes aventuras porque aún me falta mucho bagaje, tendría que leer muchos más libros de los que ya he leído, pero es cierto que el género me atrae, lo veo agazapado tras una especie de cortina misteriosa que me gustaría descorrer un día. Ya he hecho alguna cosa; un par de relatos, nada más; es un género en donde la imaginación puede volar hasta límites insospechados y que te permite, al igual que el terror y la fantasía, jugar con innumerables posibilidades.
Y después de esta extensa entrevista, solo queda despedirnos y darte las gracias de nuevo. ¿Quieres decir unas últimas palabras para los seguidores del blog?
-Fue un verdadero placer pasarme por aquí y formar parte del contenido de este blog de referencia. Siempre es un honor ser tenido en cuenta por personas que difunden la literatura de una forma tan constructiva y edificante. Gracias por invitarme; fue una gozada.

miércoles, 13 de enero de 2016

Opinión literaria: "Corte perfecto" de Alan Carter - Reseña de Francisco José Arcos Serrano


“Un debut aplastante  y fascinante que posiciona a Alan Carter como el nuevo Mesías de la novela negra australiana”



El subinspector Philip «Cato» Kwong tenía un futuro rutilante por delante. Era el «niño mimado» de la policía de Australia Occidental, la dinámica, infalible e impecable imagen de un cuerpo de policía multicultural y moderno. Pero eso era antes de verse involucrado en un caso de corrupción y, ser degradado a uno de los peores trabajos del cuerpo, la Brigada Rural.

Sin embargo, cuando un cuerpo, o mejor dicho, parte de él, es arrastrado por la marea hasta la orilla del pequeño pueblo minero de Hopetoun, a seiscientos kilómetros de Perth, los servicios de Cato vuelven a ser requeridos. En principio parece un caso de poca monta, un accidente sin importancia en las salvajes costas del Gran Océano del Sur infestadas de tiburones. Pero muy pronto Cato comprobará la verdadera naturaleza de un crimen que podría ser una segunda oportunidad para demostrar su valía como policía. Siempre y cuando logre resolver una investigación con múltiples y terribles caras… y logre salir con vida.

‘Corte Perfecto’, novela que nos trae la modesta editorial Yulca, venía precedida por una de esas unánimes críticas entusiastas que abruman a cualquier lector, dejándose llevar por tanto por la vorágine de los llamados “parabienes” para pasar así por caja.

Digámoslo ya: Alan Carter es un escritor británico muy desconocido por nuestros lares, pero que ya atesora con su primera novela el Premio Ned Kelly y el ser finalista del Premio Dagger en Reino Unido.

En la presente novela el autor vertebra el misterio a través de diferentes capas de profundidad, donde conoceremos a múltiples personajes de vital importancia para el desarrollo de la historia, característica que otorga un aspecto coral que particularmente me ha encantado.  

Gracias a este estudio tan nítido de las psiques que van apareciendo por estas páginas nos podemos hacer en la cabeza una imagen muy real de Hopetown, ese pequeño pueblo pesquero donde se desarrollan los acontecimientos, donde priman también otros factores tan importantes como pueden ser son el ámbito social o el aspecto económico de la zona.

Sorprende el ritmo tan acertado que el escritor dota a la narrativa interna del libro, consiguiendo un equilibrio perfecto y apasionante donde sobrevuela por encima de todo ello un humor en ocasiones tan negro como los hechos que acontecen en estos parajes tan peculiares.

En definitiva: Alan Carter ha escrito una de esas novelas que ningún aficionado al buen thriller debería perderse, regalándonos una historia poliédrica que nos mantendrá enganchados hasta sus páginas finales cargadas de pura adrenalina. 

martes, 10 de noviembre de 2015

Promocionamos: "Laberinto" de Miguel Aguerralde - Artículo de Víctor Cifu


Hoy promocionamos la nueva novela del escritor canario Miguel Aguerralde: Laberinto.

Creo que de Miguel no hay mucho que explicar ya que si no lo conocéis por alguna de sus diferentes novelas, ya estáis tardando en hacerlo. 

Des de su primera publicación en solitario "Claro de Luna" en 2009, Miguel no ha parado de escribir y publicar en diferentes editoriales. Vampiros, zombis y ahora hombres lobo con esta nueva novela además de participar en más de una decena de antologías.

Pero sin duda para mi su personaje más icónico es Matt el Rojo. La primera novela donde podemos encontrar a este personaje es en "Última parada: la casa de muñecas", un thriller políciaco que ningún amante del género debería perderse.

El gran momento llega cuando en 2014 el grupo Planeta decide publicarle en su sello digital su novela "Despiertame para verte morir" y acto seguido dos novelas de la ya nombrada saga de Matt el Rojo "El Fabricante de muñecas" y "En la oscuridad"

Después de esta personal introducción vamos a entrar en materia con la nueva publicación y que mejor que Miguel Aguerralde para explicarnos un poco más que vamos a encontrarnos en esta obra. 

Para ello, como ya es costumbre, le hemos realizado 4 preguntas al autor canario que muy amablemente ha contestado para que conozcáis un poco más la obra (sin spoilers) y os hagáis con ella. 

¿Qué encontraremos en Laberinto que no esté en tus otras obras?
Laberinto es sin duda mi novela más intimista y reflexiva. Es también un cuento de terror, no cabe duda, pero del tipo de terror que nace de la soledad y de la pérdida. Todos los personajes de Laberinto han sufrido esa pérdida importante que ha dejado huella en sus vidas, y lo que cuenta la novela es cómo luchan para sobreponerse a ella.

¿Por qué hombres lobo?
Cuando comencé a escribir y me propuse la meta de intentar dedicar una novela a cada uno de los arquetipos clásicos del terror. El hombre lobo era el que me faltaba, después de haber bregado con fantasmas en Claro de Luna, vampiros en Noctámbulo, seres demoniacos en Los ojos de Dios, muertos vivientes en Caminarán sobre la tierra y psicópatas asesinos en Despiértame para verte morir o El fabricante de muñecas. Curioso que haya sido el último, ya que para mí es de los más estimulantes. 
¿Qué esperas de esta obra?Me gustaría especialmente que la historia de Ángel y Andrea volara de mi rincón de escritura y recorriera muchos kilómetros. Más allá de números de ventas, me gustaría que en muchos y diferentes lugares disfrutaran de esta novela.


¿Cómo surgió la idea de la novela y de su titulo?
Responde al espacio en el que sucede, la aldea de Laberinto, un lugar infernal del que lo se puede salir.Laberinto surge de su personaje principal, Ángel, que nos sumerge en su dolor y en la depresión que sufre. Los motivos que llevan a Ángel a abandonar su zona de confort, su entorno, y salir a buscar lo que ha perdido, nos son tan conocidos y comunes que la historia resulta por sí sola. El título de la novela corresponde al espacio en el que sucede, la aldea de Laberinto, un lugar infernal del que lo se puede salir.

¿Qué esperas de esta obra?
Me gustaría especialmente que la historia de Ángel y Andrea volara de mi rincón de escritura y recorriera muchos kilómetros. Más allá de números de ventas, me gustaría que en muchos y diferentes lugares disfrutaran de esta novela.




Pues ya sabéis amigos, Miguel quiere que muchos de nosotros disfrutemos de esta novela y el primer paso para ello es comprarla y disfrutar de su lectura.

Os quiero recordar que el viernes 13 de Noviembre a las 19.00 tenéis una cita con el autor en la Biblioteca Publica de Playa Blanca. 




A continuación os dejo la sinopsis del libro y la web de la editorial Mercurio para todos aquellos que queráis que os llegue la novela a vuestra casa.


La vida puede darte la espalda en una fracción de segundo. Ángel, un reputado fotógrafo, sufrió hace unos meses un trágico accidente por culpa de un desamor. Los médicos pudieron salvarle la vida, pero no le salvaron la vista. Ángel se está quedando ciego.
Hoy no es capaz de salir de la depresión, consume los días entre botellas de alcohol y el recuerdo de la mujer por la que lo perdió todo, mientras espera que sus ojos decidan apagarse definitivamente. Solo una chispa de voluntad, quizá la última, le empujará a volar miles de kilómetros para ir a buscarla.
Y le hará perderse.
Laberinto es el lugar al que uno no quiere llegar, del que no se puede salir. Una aldea olvidada en el tiempo y sometida al yugo de una maldición inquebrantable. Un pueblo sin vida, guardián de terribles secretos y una leyenda negra. Sus únicos habitantes aúllan, hambrientos y anhelantes, cada noche a la luz de la luna.

No deberías entrar ahí.

miércoles, 28 de octubre de 2015

Opinión literaria: "Revival" de Stephen King por Francisco José Arcos Serrano


Una novela inquietante repleta de homenajes que dejará satisfechos tanto a sus fieles seguidores como a los no iniciados"


Octubre de 1962. En una pequeña localidad de Nueva Inglaterra la sombra de un hombre se cierne sobre un niño que juega ensimismado con sus soldaditos. Cuando Jamie Morton levanta la vista, ve una figura imponente. Se trata de Charles Jacobs, el nuevo pastor, con quien pronto establecerá un estrecho vínculo basado en su fascinación por los experimentos con electricidad.
Varias décadas más tarde, Jamie ha caído en las drogas y lleva una vida nómada tocando la guitarra para diferentes bandas por bares de todo el país. Entonces vuelve a cruzarse con Jacobs -dedicado ahora al espectáculo y a crear deslumbrantes «retratos de luz»-, y este encuentro tendrá importantes consecuencias para ambos. Su vínculo se convertirá en un pacto más allá incluso del ideado por el Diablo, y Jamie descubrirá que «renacer» puede tener más de un significado.

Ganazas tenía ya de adentrarme en la última novela del “Tito King”, ya que soy un ferviente admirador de toda su producción desde mi más tierna infancia, y aquí estoy de nuevo para daros a conocer mis impresiones sobre ‘Revival’ y sus algo más de 400 páginas que se leen prácticamente de un tirón.
Hay varias influencias que sobrevuelan por toda la novela y que de primeras sorprenden bastante: por una parte tenemos a Ray Bradbury con todo lo relacionado con lo “eléctrico” de la trama; encontramos también retazos de Lovecraft, en cuanto a un elemento sobrenatural que descubrimos en estas páginas, el cual es de suma importancia para el devenir de los acontecimientos.
Una vez que comenzamos su lectura es innegable la capacidad del escritor de Maine para mantenernos enganchados a la historia, logrando una excelente atmósfera, testigo silente de momentos realmente terroríficos, algunos de los cuales se encuentran desde ya entre los más destacados de sus últimas producciones.
Tampoco faltan temas ya universales como la infancia y la nostalgia que nos provoca los años que nos distancian cada vez más de ella, los primeros amores o la religión.
La narración vuelve a estar salpicada con detalles referenciales a otras obras suyas, resultando de todo ello un vínculo muy interesante entre lector y escritor.
En cuanto a sus personajes: encontramos certeras radiografías de los mismos, haciendo de ellos unas figuras que realmente interesa saber de ellas hasta el sorprendente final del libro: sin lugar a dudas, uno de los mejores del escritor y también, para servidor, uno de los más sorprendentes de los últimos años.
En definitiva: ‘Revival’ supone una vuelta a los orígenes de Stephen King, mostrando una faceta oscura y opresiva que da lugar a un libro genuino y depurado que seguramente encantará a los lectores de siempre.
Está claro que como lector sigo disfrutando plenamente de las historias de Stephen King y ojalá esta unión entre servidor y el Rey del Terror no se acabe nunca. Con novelas como ‘Revival’ lo va a tener difícil el separarme de él...





martes, 7 de abril de 2015

Opinión literaria: "Tú te vas, tú te quedas" de M.J.Arlidge por Francisco José Arcos



 

“Una escalofriante y negra historia que se introduce en los recovecos más oscuros de la psique humana”




Dos opciones. Un único superviviente . Una chica sale del bosque casi moribunda. Su historia parece increíble. Pero es verdadera. Cada una de las terribles palabras que pronuncia. Días después otra persona aparece en similares circunstancias. Poco a poco comienza a quedar claro un modo de actuar. Alguien está secuestrando a sus víctimas por parejas, las recluye y les hace afrontar un dilema: matar o morir. ¿Qué preferirías: perder la vida o perder la razón? La inspectora de policía Helen Grace ha tenido que hacer frente a sus propios demonios y ha llegado a lo más alto. Mientras dirige esta investigación para dar caza al monstruo que anda suelto descubre que quizá sean los propios supervivientes quienes tengan la clave para resolver el caso. Y, a menos que lo consiga, morirán más inocentes



Un nuevo autor de novela negra la está liando parda en el Reino Unido con más de 120.000 ejemplares vendidos. No hablamos de otro que de MJ Arlidge y con ‘Tú te vas, tú te quedas’, un libro que está cosechando unas críticas brutales a lo largo y ancho del mundo y que ahora el sello editorial Suma de Letras ha publicado hace escasos días en nuestro país.


Pues bien, una vez leído el libro, podemos decir que es una historia que atrapa desde la primera página, mérito atribuible al ritmo tan vertiginoso que imprime el autor a la intriga, haciendo partícipe al lector hasta el tercio final del libro, donde sabremos la identidad del asesino y las consecuencias que eso conlleva a nuestra protagonista, una Helen Grace muy humana y a la que conoceremos cada vez un poco más.


MJ Arlidge articula la acción en capítulos cortos en los que nos narra distintas perspectivas de los hechos y de la investigación en curso (personalmente me quedo con los dedicados a las víctimas, las cuales se convierten en asesinos en contra de su voluntad si quieren sobrevivir: algo parecido a lo que hacía mi querido Jigsaw en la saga Saw pero sin tanto gore y carnaza, claro); Aún así debo advertir que hay algún que otro capítulo un tanto desagradable que puede provocar la arcada del lector menos avezado en estos menesteres.


Otro de los detalles que llaman la atención es el “tratamiento/terapia” que recibe nuestra protagonista para redimirse de un trauma del pasado que le persigue día a día y así mitigar el peso de lo acontecido.


En fin: ‘Tú te vas, tú te quedas’ es un impresionante thriller repleto de tensión que ningún aficionado al género negro debería perderse.

miércoles, 11 de marzo de 2015

Opinión Literaria: "Tormenta Sangrienta" de Tony Jiménez por Víctor Cifu



 

Tormenta Sangrienta es como introducir en una coctelera los mejores ingredientes del género de terror, añadir la narrativa y creatividad de Tony para conseguir una novela prácticamente perfecta.Sin duda, la mejor obra de este escritor y una de las mejores novelas de terror que he leído.

 



Manhattan, Nueva York. Lisey, la tormenta del siglo, se acerca a la isla. La lluvia, las inundaciones y la oscuridad se harán con Manhattan durante toda una semana, lo cual provoca que la mayor parte de sus habitantes evacuen sus hogares, aunque no todos, pues el antiguo hotel conocido como el Chapel, convertido en un bloque de apartamentos, sirve como refugio a muchos de sus vecinos.
Sin embargo, el lugar esconde muchos secretos, siniestros misterios que sobrevuelan el tenso ambiente que se libera cuando llega la tormenta, una tempestad sin precedentes que oculta tanto como el viejo edificio.
Es posible que los habitantes del Chapel no sólo tengan que preocuparse por el interior de las entrañas del antiguo hotel, sino también por lo que trae Lisey, cosas horribles que poseen siete días para convertir Manhattan en un infierno.
Y todo comienza con una gota de sangre en la lluvia.

Todos o casi todos conocéis el especial cariño que le tengo a una de las novelas de este autor, “Cinco Tumbas sin lápida”. Con ella descubrí a uno de mis escritores favoritos, una de mis novelas favoritas y un buen amigo.

Cuando se hizo oficial que Tony Jiménez publicaba nueva novela bajo el sello Applehead Team Creaciones  ya os podéis imaginar la alegría que supuso para mí. La espera para tener en mis manos “Tormenta Sangrienta” fue terrible, pero ha merecido mucho la pena.

Sabiendo lo que a mí me había gustado “Cinco Tumbas sin Lápida” empecé a leer esta nueva novela con muchas ganas pero nunca imaginando que superaría a su hermana pequeña, estaba totalmente equivocado.

A medida que vas leyendo la novela te vas dando cuenta de que estás ante algo grande, algo muy grande. Es cierto que en las primeras 100 páginas, más o menos, Tony nos presenta a los personajes pero lo hace de una manera que es imposible aburrirte, es más, disfrutas conociendo a cada uno de esos personajes y sabes que cuando termines la novela no todos seguirán vivos.

Pasados ese centenar de páginas es cuando empieza la acción y es cuando te quedas totalmente enganchado y no puedes dejar de leer una palabra tras otra, una frase tras otra, un párrafo tras otro,…hasta tal punto que incluso casi me paso de parada en el metro.

¿Se pueden coger ingredientes de diferentes obras o películas y crear una novela original? Si, y Tony lo hace. Está claro que la novela encontraremos referencias a Stephen King, John Carpenter y muchos otros, pero en ningún momento nos dará la sensación de que “Tormenta Sangrienta” es una simple copia.

Otra de las virtudes de esta novela son los personajes. Una gran cantidad de personajes, cada uno con su personalidad, con sus particularidades, con su defectos y virtudes y todos muy diferenciables. Por mucho que lo intentemos, no conseguiremos poner nombre y apellidos al protagonista principal ya que a mi parecer todos y cada uno de ellos tienen un papel fundamental en la novela. No te puedes encariñar con ninguno de ellos ya que no sabes si morirá, si se convertirá en enemigo, si salvará a todo el grupo, etc. y esto enriquece la lectura de la novela ya que no sabes que ocurrirá cuando pases de página.

Algo menos de 700 páginas que no se hacen pesadas en ningún momento, al contrario. Cuando terminé la novela, rápidamente le envié un mensaje a Tony para saber si tenía previsto hacer una secuela, precuela, antología de relatos, comic o lo que le viniera en gana, su respuesta fue “¿No has tenido suficiente con casi 700 páginas?” y mi contestación fue rotunda “NO”.

Con “Tormenta Sangrienta” me ha pasado exactamente lo mismo que con la trilogía de “El Cuarto Jinete” de Víctor Blázquez (otro de mis escritores favoritos sobretodo en el género Z) y es que en ningún momento decae la trama ni se te hace soporífera la lectura, no hay paja señores y eso es de agradecer.

También quiero hace hincapié a la genial portada realizada por Almu.CJ. Ese hotel, esos tonos rojos, esos relámpagos que advierten de una tormenta en la que pondrá en jaque no solo a los habitantes del Chapel, sino que a toda una ciudad. Me parece acertadísima y guarda una gran relación con la historia que cuenta en su interior. Además también me han encantado las dos ilustraciones interiores que captan perfectamente dos de los elementos más relevantes de esta novela. Bravo Almu.

No me olvido de Applehead Team Creaciones y el genial trabajo que han hecho. Señores un libro de casi 700 páginas, con solapas, con una genial maquetación, una fantástica cubierta y un autor como Tony Jiménez por tan solo 19.95 euros  y quien lo compró en preventa ,como un servidor, solo 16.50euros. Bravo por la editorial tanto por el trabajo que han hecho como por haber fichado a Tony, creo que difícilmente podríais haber estado más acertados para iniciar vuestra nueva línea editorial de terror.

Y  para terminar solo me falta felicitar a Tony Jiménez, aunque la palabra “felicitar” se me queda corta después de haber leído esta obra maestra. Simplemente 4 palabras: ERES EL PUTO AMO.

A los lectores del blog, el mejor consejo que os puedo dar es que compréis el libro, lo leáis y lo disfrutéis os aseguro que me lo agradeceréis.