viernes, 31 de julio de 2015

Opinión Cinematográfica: "Del revés (Inside Out)" por Rubén Giráldez





Tras realizar títulos tan innecesarios como la secuela de Cars y los spin-offs de Aviones, y con Disney realizando películas de animación digital como Enredados o Big Hero 6 que pueden competir (e incluso superar) con títulos de Pixar. El estudio del flexo saltarín tenía que ponerse las pilas y esmerarse en realizar una película original y que recordase al público porqué es uno de los grandes de la animación... ¡Y vaya si lo han logrado con Inside Out!

Desde siempre, las películas de Pixar nos han hecho experimentar todo un sinfín de sentimientos, pero por qué no ir un paso más... ¿Por qué no realizar una película sobre los sentimientos?

Esta es la rompedora premisa parida por Pete Docter, genio tras títulos como Monstruos S.A y Up, y que se la debemos a su hija, que fue su verdadera fuente de inspiración.

Nuestra mente está regida por cinco sentimientos: Alegría, Tristeza, Asco, Ira y Miedo. Ellos son los que, en el puesto de mando, tratan de controlar nuestras acciones y decisiones.




La trama sigue la vida de Riley en uno de los momentos más duros de su joven vida: la mudanza a San Francisco por culpa del trabajo de su padre. Un hecho bastante común con el que la historia ya trata de empezar a conectar con el espectador.

Por azares del destino, Alegría y Tristeza acaban fuera del centro de control dejando a Ira, Miedo y Asco controlando el cotarro... el desastre está servido.

Es cierto que un servidor ya asistía motivado al cine por culpa de la premisa y el trailer (que, por cierto, como en el caso de Los Minions destripa una gran escena que podrían habérsela reservado para la película), ¡pero es que ha acabado encantándome más de lo esperado! No me extraña la oleada de críticas positivas tan bien merecidas.

Empezemos con las alabanzas que ya comencé comentando lo de la propuesta original. Los personajes son GENIALES. 
Empezando por el elenco protagonista, que son estos cinco sentimientos. En un principio se tenía pensado que fuesen más de veinte, pero por suerte se quedaron con cinco. Y esta ha sido una gran decisión. A pesar de que cada uno tiene su propia personalidad ligada al sentimiento que encarna, todos acaban siendo la mar de profundos e interesantes. La niña protagonista es de alabar, ya que rompe el estereotipo de niña-princesa (es una niña bastante normal y que incluso juega al hockey), y sus padres son otro alarde de normalidad, conformando una familia la mar de cercana. El plantel de secundarios también es de lujo. Descubriéndonos a más habitantes de nuestra mente (o más bien la de Riley) como los olvidadizos, el novio imaginario o el adorable y encantador Bing Bong (un elefante-gato con parte de delfín y hecho con algodón de azúcar que llora caramelos, antiguo amigo imaginario de la pequeña). 




No me voy a molestar mucho en alabar la calidad de la animación, porque este estudio ya nos tiene malacostumbrados a verdaderos espectáculos visuales.

Si de algo puede jactarse Pixar es de diseñar mundos fantásticos la mar de detallistas y que acabamos creyéndonos (el ejemplo más representativo es Monstruos S.A), y con Inside Out, no iban a perder la oportunidad de volver a hacerlo. Desde el centro de mando hasta las islas de la mente, continuando por el paso abstracto (grandísimo momento), y por no hablar de las esferas de los recuerdos... este viaje a nuestra mente se vuelve de lo más fascinante e imaginativo.

La BSO firmada por Michael Giaccino es preciosa, con un tema inicial cuya fantástica sintonía puebla toda la película.
Inside Out es una gran película que habla de lo importante que son todos nuestros sentimientos, de la amistad, la familia y de ese gran paso que supone dejar atrás la niñez y empezar a recorrer el enrevesado camino de la madurez. Y de hecho creo que esta película es tan madura, que no la recomendaría para que viesen los niños... Sí, no me he vuelto loco. Tranquilos que os lo explico más en profundidaz:

Cierto que los niños pueden entretenerse con lo colorido del mundo de la mente y sus habitantes (además de con unos cuantos gags y slapsticks). Y la película es ideal para ver en familia. Pero está tan dirigida para un público joven y adulto y, en especial, a los niños de la edad de la protagonista, que es una pena que el mensaje se pierda en los espectadores más pequeños. Incluso el tono es bastante serio para ser una película de Pixar (habla bastante sobre lo de olvidar cosas) y tiene momentos la mar de trágicos, unidos al ritmo bastante irregular para ser una cinta de animación. Todo esto puede acabar haciendo que los más peques acaben aburridos o incluso acaben odiando la película. Es mejor que los papis los lleven a ver Los Minions y que al menos todos pasen un ameno y divertidísimo rato en familia.




Pero para todos los demás, esta película les cautivará con una historia que retrata la mar de bien el duro paso a la madurez (en serio, es una película que deberían empezar a replantearse poner en las escuelas antes de que los alumnos pasen de la primaria al instituto).

Comentar también el fabuloso labor en el doblaje español, que temí que acabase siendo lo que de verdad odiase de la cinta. Pero han sabido elegir increíblemente bien las voces de cada uno de los personajes.

Si he de decir algo malo del film, es que es tan bueno lo carismático que son el grupo de sentimientos juntos, que es una pena que se separen. Notándose el bajón en el viaje de Alegría y Tristeza.

Como suele hacer Pixar, en los créditos finales se siguen sucediendo escenas. En esta ocasión, podemos echar un rápido vistazo a unas cuantas mentes más de varias personas (y hasta animales). Gran y divertidísimo broche para salir del cine con la sonrisa grabada en el rostro.




Además, antes del film tenemos el corto Lava, una volcánica historia de amor que ya nos prepara para el cóctel de sentimientos que estamos a punto de degustar.

Así que preparaos para reír (en serio, ha sido una de las películas con las que más he reído), emocionaros, sufrir, temer y llorar con Inside Out, lo nuevo de Pixar Studios.

Lo Mejor: Su original premisa, personajes y el nuevo mundo que Pixar nos presenta.
Lo Peor: Que muchos niños tardarán unos años en disfrutarla de verdad y en aprender el mensaje de la película.

jueves, 30 de julio de 2015

Opinión literaria: "La Isla en el fin del tiempo" de Miguel Ángel Naharro por Jorge Herrero.


"La Isla en el fin del tiempo" es el claro ejemplo del porqué el pulp goza cada día de más popularidad. Diversión, aventuras, mucha acción y personajes carismáticos, y todo esto en grandes cantidades.


Miguel Ángel Naharro nos trae de nuevo al protagonista de La maldición de la Diosa Araña en otra extraordinaria aventura. 

A bordo del “Banshee”, un viejo buque de carga, se encuentran Jonathan Barker, también conocido como “La Garra”, con su fiel Morodo y la alemana Walkyria. El buque es perseguido por el “Kusanagi”, un crucero ligero del Imperio del Japón. El “Banshee” se verá atraído por una extraña y misteriosa isla, rodeada por potentes tormentas electromagnéticas, de donde es imposible escapar. 

Baker y la tripulación descubrirán, nada más poner pie en la isla, que está repleta de terribles y mortales peligros. Dinosaurios, insectos gigantes y criaturas que parecen proceder más allá del tiempo y del espacio, conviven con humanos que asemejan provenir de épocas y tiempos muy dispares. Es allí donde hallarán a la hermosa, salvaje y misteriosa Vala. 

La Garra tendrá que enfrentarse a todos los peligrosos residentes de la isla e intentar desentrañar sus misterios, si quiere tener la esperanza de regresar a su hogar. Pero los soldados del mayor Kaito Nogura y el temible comandante Suratai no piensan ponérselo fácil. 

¿Podrá sobrevivir Jonathan Barker a su estancia en la Isla en el Fin del Tiempo?



La Isla en el Fin del Tiempo es la tercera novela publicada de Miguel Ángel Naharro, y la segunda protagonizada por el personaje de Jonathan Barker alias “La Garra”, después de La Maldición de la Diosa Araña (Dlorean), y que fue la carta de presentación de este personaje, no hay que olvidar su aportación a la línea Monsters Unleashed de Tyrannosaurus Books, Drácula y los crímenes de Jack el Destripador. La novela que aquí se reseña también ha salido con la editorial Dlorean, la cual se está convirtiendo en todo un referente en cuanto a publicar novelas de temática Pulp, y recuperar a autores clásicos de este género, como son Lem Ryan y su Katham, al gran Curtis Garland y sus novelas de vampiros, y recientemente  también han publicado el primer volumen del personaje fetiche de Lou Carrigan, Baby espía mortal, y sin olvidar su apuesta por autores nacionales para sus distintas colecciones, de fantasía y espada y brujería, de Pulp, steampunk y ciencia ficción.

Miguel Ángel Naharro ha vuelto a apostar por su personaje más conocido y lo ha embarcado en una aventura más ambiciosa en cuanto a argumento y extensión que su predecesora, La maldición de la Diosa Araña, para La Isla en el Fin del Tiempo, ha optado por meter a más personajes secundarios, pero sin restarles protagonismo a los principales, y ha conseguido crear una historia que no decae en ningún momento, plagada de mucha acción, aventuras, misterios, logrando hacer de esta novela un claro ejemplo de la buena salud de la que goza el pulp nacional, y haciendo del autor un alumno que ha sabido recoger el testigo de los grandes del pulp hecho en España.

La historia arranca con Jonathan Barker y sus inseparables Morodo y Walkyria en el buque de carga “Banshee” y perseguidos por soldados  del Imperio del Japón, comandados por el temible Kaito Nogura, mayor de dicho ejército y obsesionado por capturarlos en especial a nuestro protagonista, portador de una misteriosa y extraordinaria piedra rojiza.

Tras una peligrosa y espectacular persecución, ambos barcos se verán obligados a tomar tierra en una isla, que desde el primer momento en el que pongan el pie en ella, descubrirán que no es una isla cualquiera y normal, ya que en ella, conviven terribles criaturas sacadas de tiempos remotos y de personajes provenientes de otras épocas, destacando de entre todos ellos, la misteriosa y atractiva Vala, y un personaje creación de H. Rider Haggard, de profesión descubridor y que se convertirá en otro miembro del grupo de Baker.

A la vez que intentarán escapar de los soldados japoneses, el grupo de Baker tendrá que hacer frente a otros peligros, a cada cual más increíble y terribles, poniendo en serio peligro las vidas de Baker y sus compañeros, todo ello llevará al lector y a todos los protagonistas de esta historia a un final épico y espectacular, el cual no tendrá nada que envidiar a otras historias y películas de este género, en el que no faltarán dinosaurios, malos terribles y chicas atractivas, todo ellos hará de esta novela toda una delicia y un festín pata todo aquel amante de estas historias.

Miguel Ángel Naharro ha puesto toda la carne en el asador y ha volcado todo su cariño y respeto por el género pulp para dar al lector asíduo a este tipo de historias lo que más quiere, una novela que desde la primera página no da ni un solo minuto de descanso, estando plagada de multitud de referencias, guiños y homenajes a la literatura de entretenimiento y al cómic que tantas y tan buenas historias nos ha brindado durante tantos años, pero ojo, eso no significa que el autor se haya dedicado a coger todo esto y hacer una historia que pueda ser copia o “falso homenaje”, como podría parecer, ni mucho menos, se ha servido de ellos para hacer una historia que hace pasar muy buenos y agradables ratos a todo aquel que se sumerja en el mundo de Jonathan Baker y sus compañeros de aventuras, pero con el estilo propio del autor, que en ningún momento esconde sus influencias y gustos, sino todo lo contrario, brindando a los lectores con una historia entretenida, y en mi opinión, más madura que la anterior protagonizada por La Garra.

Uno de los puntos fuertes de la novela son los personajes protagonistas, qué decir de Baker, carismático como muy pocos, su fiel amigo Morodo, a pesar de ser puro músculo, no sólo es eso, sino que es inteligente. No hay que olvidarse de Walkyria, la atractiva compañera de aventuras de Baker, con el que tiene una muy buena química, y en esta nueva aventura hay que destacar a Vala, una atractiva joven habitante de la misteriosa isla desde hace ya unos años, y que es mucho más de lo que parece, en mi opinión todo un acierto su incorporación, que esperemos no sea la última vez que oigamos hablar de ella. Tampoco hay que olvidar al villano de la historia, el mayor Kaito Nogura, que tiene todos los tópicos y elementos que tiene que tener un malo dentro del pulp.

Otro punto fuerte es la propia isla, que en determinados momentos se convierte en un personaje más de la novela, conteniendo misterios ancestrales, de los que se irán descubriendo algunos de ellos a lo largo de la historia aquí contada.

El ritmo durante toda la novela es frenético, donde no paran de suceder cosas en ningún momento, haciendo que la lectura sea rápida, ágil y muy amena. Tendiendo todo lo que tiene que haber en este tipo de historias dentro del género pulp.

Si tuviera que poner un pero, sería el tema de la portada, que en comparación con la anterior, se ve como más apagada, y no llega a impactar tanto como la de La Maldición de la Diosa Araña, pero que no empaña el resultado final.
 
En definitiva, La Isla en el Fin del Tiempo es una novela que da exactamente lo que busca el lector de este tipo de historias, diversión, aventuras, mucha acción y personajes carismáticos, y todo esto en grandes cantidades, convirtiéndose en el claro ejemplo del porqué el pulp goza cada día de más popularidad y de que hay autores nacionales que apuestan por escribir sobre este género, y editoriales que apuestan fuertemente por dicho género. 



 

miércoles, 29 de julio de 2015

Opinión Cinematográfica: "Ant-man" por Rubén Giráldez




Por fin ha llegado a nuestras pantallas la nueva película de Marvel Studios que nos presenta a un nuevo héroe de pequeño tamaño pero de mismo (o incluso más) coraje que cualquiera de los Vengadores: Ant Man.

Lo cierto es que esta película ha sido una de las más seguidas y comentadas de los últimos años. Y es que la convulsa historia de la concepción y realización de la película de las aventuras del Hombre Hormiga tiene mucha miga. 




Mucho antes de que se estrenase Iron Man, de que se diese a conocer al mundo Marvel Studios y de que Disney comprase Marvel. Al cineasta Edgar Wright, famoso por divertidísimas cintas como Zombies Party, Paul o Scott Pilgrim Contra el Mundo, se le había encargado la tarea de escribir y dirigir la película que haría que este personaje saltase de las viñetas al cine. En ese tiempo en el que las cintas de superhéroes seguían sin ser los verdaderos bombazos que son hoy en día, es cierto que esa película de Ant Man hubiese supuesto un verdadero hito. Pero por desgracia, la escritura del guión demoró demasiado tiempo. Y Marvel Studios ya estaba comenzando a edificar su Universo Cinematográfico Marvel con la gloriosa Fase 1, llegando a realizar la película de Los Vengadores sin Ant Man ni Avispa (miembros fundadores del supergrupo en los cómics).

¿Qué pasó con el guión de Ant Man? Pues que había quedado obsoleto, ya que se concibió en un principio como una película en solitario que no tenía que rendirle cuentas a ningún universo compartido. Y por lo visto Wright fue reacio a cambiarlo, por lo que los jefazos del estudio decidieron mandar realizar otro guión a espaldas del cineasta que sí estuviera conectado con el UCM. Esto no le gustó nada a Edgar Wright que terminó por abandonar el proyecto de muy mala gana. Obligando al estudio a buscar apresuradamente a un director para que se hiciese cargo de la ya programada película. Finalmente, el elegido fue Peyton Reed, director de comedias como Di que sí o Separados. Y el protagonista era otra cara conocida de la comedia como Paul Rudd (Vírgen a los 40, La Cena de los Idiotas).




Estas elecciones, unidas a esa re-rescritura del guión, que el personaje no fuese tan querido (que no conocido, ojo) o apreciado, y que tuviese la gran responsabilidad de cerrar la Fase 2 tras la ansiada secuela de Los Vengadores. Comenzaron a hacer que muchos no viesen con buenos ojos Ant Man, haciendo reinar la desconfianza y hasta llegando a vaticinar que este sería el primer gran batacazo de Marvel Studios.
 
Pero por fin podemos comprobar que... NO. No será ningún batacazo para el superestudio. Aunque parece que tendrá una recaudación la mar de modestilla, ya ha recaudado lo que costó realizarla. Y las críticas son muy positivas. Y no es para menos, Ant Man supone un nuevo hitazo de Marvel Studios y un buen final de Fase tras la desastrosa cinta que la inició (Iron Man 3).

Hablando un poco de la trama. Seguiremos los pasos de Scott Lang, un ladrón de guante blanco que lo único que quiere es lo mejor para su hija, pero que tras salir de prisión no puede evitar aceptar un último hurto. Pero esta vez, lo que se llevará será el mejor botín de su vida: un traje que lo empequeñece hasta el tamaño de una hormiga. Pronto descubrirá que ha sido elegido para ser el sucesor del traje de Ant Man y tendrá que entrenarse para realizar un robo que salvará a la Tierra del completo caos.

Pues sí, una película de superhéroes con un robo como premisa. Lo cierto es que ya con esto, queda claro que Ant Man logra distanciarse de la típica película de superhéroes. Y ya se une a otras películas de Marvel Studios como Thor: El Mundo Oscuro, Capitán América: Soldado de Invierno y Guardianes de la Galaxia, donde además de tratar el tema heroíco, tenemos un tono y premisas bastantes diferentes a lo esperadas en una cinta del género. En esta ocasión estamos ante una película de atracos cómica y de ciencia ficción. Una buena mezcla, la verdad.

Cariño, he encogido a los niños+Iron Man+Ocean´s Eleven= Ant Man




Empezaré hablando del elenco encabezado por Paul Rudd quien, como ya hizo Michael Coxx (Stardust) en la serie Marvel´s Daredevil, ha demostrado a los que no lo veíamos con tan buenos ojos en un principio, ser un gran personaje y héroe. Lo cierto es que es imposible que te caiga mal. Ha sido una excelente idea darle el papel a un habitual de la comedia, ya que, aunque se esfuerzen mucho, es imposible esbozar una socarrona sonrisa cuando oímos hablar de un hombre hormiga. Su personaje alcanza tan altas cotas de carisma que ya está a la par de Star Lord en la batalla por desbancar al Tony Stark de Robert Downey Jr. (Sherlock Holmes, Zodiac) el puesto de encantador gracioeste del UCM. Además, nos da una nueva visión del héroe más preocupado por su familia (aunque es cierto que esto no es nuevo, ya que acabamos de verlo con Ojo de Halcón en La Era de Ultrón) y que nos regala muy buenas y enternecedoras escenas con su hija en la ficción (demasiado encantadora es esta niña).

Algo que está haciendo ultimamente Marvel Studios, es hacer que grandes actores se unan a su universo cinematográfico. Robert Redford (Habana, Memorias de África) en Soldado de Invierno, Glenn Close (101 Dálmatas, Hamlet) en Guardianes de la Galaxia y ahora Michael Douglas (Wall Street, Instinto Básico). Él encarna al doctor Hank Pym, el primer Ant Man en los cómics, que aquí vemos bastante avejentado. Él será el mentor de Scott en la operación de este robo por proteger al mundo de su descubrimiento: las párticulas Pym. 

No puedo dejar de aplaudir a este actor que ha sabido darle a este personaje no tan querido en el mundo de los cómics un tratamiento tan bueno, que hace que el espectador acabe cogiéndole demasiado cariño (como ya hizo Robert Downey Jr.). Un personaje muy bien construído que ha descubierto uno de los mayores logros de la humanidad y que aún así sabe que debe mantenerlo en secreto, ya que en malas manos puede acabar por destruírla (es una pena que al final decidiesen cortar toda coherencia con los cómics y no dejar ni siquiera que él fuese el que concibiese el programa Ultron). Desde su primera aparición en esa estupenda escena introductoria en el que han rejuvenecido de gran manera al actor mediante CGI, Douglas ya empieza a regalarnos momentazos y frasazas por parte de su personaje. Además de cerrar las bocas de los que criticaban la película por olvidarse de que Hank es el verdadero Ant Man (memorable esa escena con Cross revelando las imágenes de archivo de las misiones del hombre hormiga).

Aunque la tópica historia de odio a su padre le hace restar puntos, el personaje de Hope Van Dyne (aunque existe una Hope Pym en los cómics, es villana. Por lo tanto este es un personaje concebido exclusivamente para la película) sigue siendo muy bueno. Evangeline Lily se redime del (innecesario) personaje de Tauriel en la reciente trilogía de El Hobbit y nos regala uno verdaderamente fuerte y atormentada por el aparente desprecio de su padre y que esperemos que tenga un gran futuro en el UCM.

Entre los secundarios, a parte de la encantadora horda de hormigas, nos encontramos con un trío de raterillos la mar de salados y que otorgan a Ant Man otra buena dosis de humor. Sobre todo con el personaje de Michael Peña (Crash, 30 minutos o menos) que, a pesar de ser otro topicazo (esta vez mexicano), acaba siendo uno de los mejores, sobre todo con esas historias en las que un colega de su colega de otro colega le cuenta algo. La verdad es que espero que no se olviden de ellos en próximas apariciones de Ant Man. 




Para terminar de hablar de los personajes, hablemos del verdadero fallo de la película: el villano. Esta vez encarnado por Corey Stoll, al que actualmente podemos ver despachando vampiros víricos en The Strain, que interpreta a Darren Cross, alias Chaqueta Amarilla. Este ha sido otro de los temas más comentados y críticados de la película debido a que Chaqueta Amarilla es uno de los alter egos de Hank Pym en los cómics. Pero aquí no será más que un traje que quiere comerciar militarmente Darren y que acabará usando. Aunque no es culpa del actor, nadie puede negar que Chaqueta Amarilla peca de ese sangrante estigma que Marvel Studios lleva arrastrándo desde Iron Man. Y es que con excepción de Loki o Ultron (como no hemos visto a Thanos en acción y Wilson Fisk es de las series de televisión, no puedo mencionarlos), ninguno de la galería de villanos del UCM llegan a ser verdaderas némesis o amenazas para el héroe de turno. En esta ocasión no es una excepción. Aunque parece que hay un esfuerzo por definir al personaje, terminan pasando y haciendo que sea malo solo porque la historia lo requiere. De hecho, yo veo a Darren como una suerte de Obadiah Stane de la primera entrega del Hombre de Hierro (si hasta tarda casi toda la película en ponerse el traje). Aún con todo, las dos peleas que protagoniza con Ant Man son en verdad espectaculares.

Como ya dije antes esta película derrocha humor. Ya no es nada raro que todas las producciones de Marvel Studios hagan gala de este toque que las diferencia demasiado de las producciones de su oscuro competidor. Pero en esta cinta era algo casi obligado (que estamos hablando de un hombre hormiga, hasta el propio personaje no puede evitar sentirse algo idiota al llamarse así). Con lo que para los que están en pie de guerra ante este movimiento por parte del estudio, pueden acabar odiando mucho la cinta. Si no es así, disfruta. Porque ya solo ese tono buenrollero ochentero te hace esbozar una sonrisita.

Los efectos especiales son alucinantes. Y los momentos en el mundo microscópico son una verdadera gozada, llegando al culmen en la parte del reino cuántico. Las hormigas son un excelente recurso que han sabido aprovechar muy, muy bien. Y en definitiva, han sabido sacar el mayor provecho a las habilidades de este particular superhéroe.





La verdad es que esta es la película más modesta y de "andar por casa" del estudio. No estamos contando la historia de un super soldado americano en plena segunda guerra mundial, ni de un Dios Nórdico en su reino mágico, ni tratamos con amenazas de otros mundos. No, estamos ante la historia de un personaje que se encoge a tamaño minúsculo y que tiene que robar un traje que acabará revolucionando el significado de las guerras. Notamos como, a pesar de que sean épicas e increíbles, las batallas y aventuras de este héroe son de los más modestas a comparación de las de Iron Man y compañía. Pero no por eso hay que quitarle mérito ni al personaje ni a la película.

Muchos siguen tirándose de los pelos por la marcha de Edgar Wright del proyecto, que acaban preguntándose por la película que podríamos haber visto en lugar de esta. Y es que el sr. Joss Whedon (Firefly, Los Vengadores) les puso a muchos los dientes largos al comentar que tras leer ese primer guión, podíamos haber estado ante la mejor película de superhéroes de la historia. La verdad, no pongo en duda de que habría sido increíble. Pero daría lo mismo, esa película NO podría formar parte del UCM. Y de todos modos, el guión final tiene el esquema del libreto de Wright (la idea del robo y el relevo de Hank a Scott, por no hablar de unos cuantos momentos que se nota que son 100% Wright). Pero reconozcamos que la versión final ha quedado genialmente integrada en el UCM.

Pues sí, Ant Man está repleta de guiños, menciones y referencias. Desde la primera escena con Howard Stark y la ya avejentada Peggy Carter (haciéndonos desear una segunda temporada de su serie), las menciones a Los Vengadores (e incluso la aparición de uno de los Nuevos Vengadores) y la referencia a cierto trepamuros (SÍ, YA ESTÁ BALANCEÁNDOSE POR EL UNIVERSO CINEMATOGRÁFICO DE MARVEL). A pesar de seguir teniendo gran entidad individual, Ant Man acaba siendo también la cinta más integrada del UCM.

Los que no veaís a nuestro querido Stan Lee al pasar la hora de metraje no os preocupéis, al igual que en Los Vengadores su cameo se hace esperar, pero sigue arrancándonos una sonrisa (EXCELSIOR).




Y nada de levantarse del asiento hasta que terminen TODOS los títulos de crédito. Porque no solo tendremos una... sino dos escenas post créditos. La primera es un cliffhanger que nos augura un gran futuro para el personaje de Hope en el UCM. Y la segunda es un verdadero BOMBAZO que nos da nuestra primera ración oficial de la próxima película de Marvel Studios que iniciará la esperadísima Fase 3 (al final Ant Man ha acabado siendo una excelente forma de finalizar la Fase 2).

Puede que Ant Man no acabe gustando a todo el mundo. Pero lo cierto es que es una película que no busca ser la mejor del género, pero es verdad que acaba siendo una de las mejores. Además de ser una historia de orígenes genial (a pesar de que a muchos pueda aburrir en su primera parte), una buena forma de terminar la Fase 2 y un soplo de aire fresco al género. Marvel Studios ha sabido trabajar con lo que tenía y nos ha dado una de las mejores historias de su Universo Cinematográfico hasta ahora (en el inminente futuro tenemos una guerra civil, un doctor la mar de extraño, una nueva película de Spiderman, unas guerras del Infinito...).

¿Preparados para descubrir esta gran aventura de pequeñas proporciones y descubrir que, a la hora de ser un héroe, el tamaño no importa?

Lo Mejor: Los personajes, el tono y lo conectada que está con el UCM.
Lo Peor: Que siempre acabaremos pensando en la película que pudo ser.